lunes, 10 de febrero de 2014

Sobre los cuatro positivos del Clásico RCN

(Por Gianni in Testa)


Dentro de la innumerable cadena de hechos que no transmite confianza a los aficionados, patrocinadores y organizadores (es una suposición en estos dos últimos casos), está ese manejo tan laxo y tan poco riguroso para investigar y, en este caso, sancionar unos positivos presentados en una carrera hace cinco meses. Desconozco los protocolos, pero cualquiera que estos sean, no son de buen recibo que un hecho tan grave se demore tanto tiempo en tener una decisión. 

Los cuatro ciclistas son, por así decirlo, del "segundo lote" del ciclismo nacional y creo que con eso se deja tranquila a la gente preocupada con que los afectados fueran las cabezas o los protagonistas de la carrera. Sin embargo, queda ese malestar remanente que nos obliga a cuestionarnos sobre la transparencia del ciclismo local y sobre todo de la verdad del compromiso ético de los ciclistas y los equipos en el control y el uso de substancias dopantes. 


¿Cuatro ciclistas en una sola carrera? Eso no es poco. Es muy grave. En el caso particular del equipo GW es el tercer ciclista positivo en el 2013... más grave aún. No creo que en ningún equipo haya una "política" para dopar corredores, pero parecen creer que con mirar para otro lado y hacerse el desentendido es suficiente, que es moralmente lo mismo. El caso de GW es elocuente y mientras los patrocinadores no se pongan rigurosos y les exijan a sus patrocinados correr como debe ser, no pasará nada. Los Gurús  del periodismo, los organizadores de las carreras, los técnicos y los mismos ciclistas jamás dirán nada, luego corresponde a los patrocinantes exigir un manejo diferente del tema para presionar soluciones.

Por supuesto que este no es un caso aislado, es simplemente una muestra "bastante representativa" de la problemática que afecta nuestro ciclismo desde hace años. ¿Qué le espera a gente que corre limpia y honesta (estilo 4-72) en las carreras en Colombia? Posiblemente irse a correr a Europa, donde puedan encontrar condiciones más equitativas en las cuales medirse a sus rivales.  En Colombia que entre el diablo y escoja y que gane el más vivo.

¿La Federación nos explicará porqué se demoró casi 6 meses tomar una contramuestra y hacer un nuevo control para tomar una decisión? Esa demora da la lamentable sensación que por cosas de la vida, la información se "salió" de control y terminó siendo manejada en los medios y las redes sociales y que el objetivo genuino era manejarla de puertas para adentro y mandar a estos cuatro señores voluntariamente a descansar un rato sin hacer ruido.

Ese parece ser el eje del tema: No hacer ruido.  Mencionarle a un ciclista el tema del doping es como echarle la madre: lo miran a uno por encima del hombro, porque es que "usted no sabe como es que son las cosas en la realidad" o "usted solamente se guía por lo que aparece en Internet". Pero ninguno habla ni dice nada.  ¿Cuál es entonces la verdad? ¿A quién se la preguntamos si los afectados (porque son los afectados física y profesionalmente) no hablan? 

¿Cuál es la declaración contundente de la Federación? ¿Dónde está la automática expresión de rechazo y condena de los equipo y managers? ¿qué va a pasar en GW? ¿Dónde están los ciclistas condenando el hecho? 

Todo esto me ratifica lo que siempre he sostenido: Por más que se controle a los ciclistas con 1000 procedimientos, hay una decidida cultura destinada a hacer trampa. Esta es la enésima comprobación.