sábado, 7 de diciembre de 2013

Entrevista a Johnatan Paredes - Campeón Panamericano

(Por El Forastero)


Con el Super GIROS en 2013
Jonathan Paredes, el actual Campeón panamericano de ruta, es una de las contrataciones del Team Colombia para 2014. Nacido en Duitama hace 24 años, él mismo se reconoce como un corredor pa’ las que sea que tiene altas expectativas para el año que viene. La Ruta del Escarabajo se puso en contacto con él para poder conocerlo y saber sus metas y proyecciones para 2014.



Buenos días, Jonathan, Bienvenido a La Ruta del escarabajo

Buenos días, muchas gracias por esta oportunidad


Cuéntenos cómo se inicia usted en el ciclismo
Yo comencé gracias a mi papá, porque cuando yo era pequeño era muy gordito y él me sacó a dar una vuelta por el lado del pantano de Vargas y me quedó gustando. Cada domingo salíamos, a pesar de que él trabajaba en Bavaria, tenía turnos y a veces estaba trasnochado y era difícil convencerlo (risas).

¿Cuándo comenzó a entrenar seriamente?
Alrededor de los 16-17 años empecé a entrenar en una escuela de Duitama llamada Toritos Oliver (ya no existe), luego me fui a un club de Sogamoso llamado Crucesog, del que han salido corredores como John Martínez y Fredy Piamonte. Don Edilberto Martinez, de una panadería en El Crucero, estaba al frente del club y nos empezó a llevar a correr en competencias locales para juveniles, nos patrocinaba las carreras, nos pagaba hotel, gastos, y yo contento porque ya me estaba dedicando a lo que más me gustaba.

¿Cuándo comenzó a competir?
Mi primer carrera a nivel nacional fue el Campeonato Nacional juvenil de Neiva, que ganó Dúber Quintero y en el que yo llegué 11°. Después fui a la Vuelta al Porvenir con un equipo de aquí llamado Pedaleando por Boyacá que organizó mi amigo Antonio Alarcón. Él fue el que impulsó todo, nos llevó como equipo también a carreras por fuera de Boyacá, nos ayudaba mucho… yo le debo mucho a él porque me impulsó a querer este deporte, y también a su hijo Toño, que es un gran amigo mío. 

¿Usted qué tipo de corredor es?
Yo digo que soy un corredor pa’ las que sea. Lo que más me gusta es las carreras de un día y estar en las fugas, pero si hay que rodar en el plano o si hay que escalar, lo hago bien si me encuentro en condiciones.

¿Qué sucedió al terminar la categoría juvenil?
Al siguiente año salí del colegio, pasé a estudiar contaduría en la universidad Santo Tomás de Tunja en las noches, para poder entrenar de día. Fue un poco duro porque mis papás me presionaban para que me concentrara en estudiar, pero a veces no podía hacerlo bien porque estaba en competencias, y también por estar estudiando no podía entrenar al 100%

¿Cómo hizo para conciliar esas dos obligaciones?
Ese año fui a la vuelta a la juventud pero no me fue muy bien, quedé aproximadamente de 60° y regresé mi casa con un bajón de ánimo por el resultado. Entonces le dije a mis padres que me quería dedicar al ciclismo, que el estudio siempre iba a estar ahí pero la época de ciclista era muy corta, les pedí que me dieran la oportunidad de ser ciclista y ellos estuvieron en desacuerdo total inicialmente, pero al final me brindaron su completo apoyo y me retiré de estudiar para dedicarme de lleno a entrenar. Alcancé a hacer dos semestres. 

Y al final se dedicó de lleno al ciclismo
Sí, la bicicleta es mi pasión, todos los días me anima a levantarme a entrenar y a cumplir un sueño. Me permitió ser disciplinado y conocerme. Al poco tiempo ya corría con un equipo de Boyacá llamado Secretaría de Hacienda, con el técnico Jair Bernal. 

En el segundo semestre ya comencé a tener resultados, andaba muy bien con los otros sub23, quedé 2° o 3° en la clasificación sub 23 de varias carreras, aguantaba el ritmo de los élite... Pero en un circuito en Boyacá tuve una caída, me disloqué un hombro no pude ir al Clásico RCN. 

¿Cómo era su situación contractual y económica como ciclista?
En esos años fue bastante difícil. Siempre estuve ahí, de un lado para otro, pidiendo pista, hablando con equipos y técnicos para que me colaboraran, rebuscando patrocinios. Es difícil porque aquí en Boyacá hay mucho ciclista que anda muy bien, y así como yo había otros 20. Varios de los jóvenes de esos años hoy están en grandes equipos: Nairo Quintana (Movistar), Jeffrey Romero, Michael Rodríguez (Ambos en el Team Colombia 2013), Edwar Beltrán (El otro año correrá en el Flaminia de Italia) y muchos otros más.

Corriendo para el EBSA
¿Cuándo consigue entrar en un equipo profesional?
En 2010 corrí en el Boyacá orgullo de américa, fui a la vuelta a la juventud y quedé 17°. Al año siguiente entré al EBSA, que estaba dirigido por Rafael Antonio Niño. Hice carreras locales y me llevaron a correr todo el año, y eso es muy importante para un corredor: En la vuelta a la juventud quedé 20°, corrí mi primera vuelta a Colombia y fui 3° en la clasificación sub23. También Hice el Clásico RCN. 

¿Cómo fue su 2012?
Ese ha sido el año más duro hasta ahora, porque al comienzo nadie me dio apoyo, empecé corriendo sin equipo, por cuenta de mi bolsillo y del de mis padres. Para la Clásica de Fusagasugá conté con el apoyo de Julio Bernal, también quedé muy agradecido porque prácticamente no me conocía y me pagó los gastos. Me fue bien, hice 15° y como estaba corriendo Oscar Pachón con nosotros, le colaboré para que ganara las metas volantes. De todas maneras, ese apoyo (Que es muy importante y por el que estoy muy agradecido) era solo para las carreras, no podemos decir que tuviera sueldo, así que seguía dependiendo del apoyo de mis padres.

Es una situación difícil
En Punta del Este, cuando disputó
la Vuelta a Uruguay
Sí, claro, pero yo nunca perdía la fe, seguía juicioso, dedicado entrenando. En esa carrera de Fusa recibí una llamada de Mauro Mora, que tenía una invitación para la vuelta a Uruguay y la acepté. Quedé muy agradecido también porque fue mi primera experiencia en el exterior. 

¿Cómo le fue en esa carrera?
Allá se corre muy diferente que aquí, todos eran pisteros y los recorridos eran muy planos, se corría con abanicos y por esa época yo estaba subiendo muy bien. En esa carrera estaba entre los 10 de la general hasta el día de la crono, porque yo llevaba mi bicicleta de contrarreloj, pero Iván Mauricio Casas era el líder del equipo y resulta que a él no le llegó la bicicleta y me tocó prestársela. Al final él hizo 6° en la clasificación general.

¿Qué hizo a su regreso?
Aquí me preparé bien para la vuelta a Boyacá y el Clásico RCN, me dije “Dios mío, aquí tiene que ser, para el otro año tengo que tener equipo porque si no va a ser muy difícil”. Antes de esa vuelta a Boyacá estaba corriendo sin equipo, pero Antonio Alarcón y Víctor Becerra armaron uno en Sogamoso y fuimos a correr allí. En esa vuelta hablé con Chepe González, que estaba a cargo del equipó de Fuerzas Armadas y le pedí el favor de que me llevara al clásico RCN, me dijo “Depende de cómo le vaya en esta vuelta a Boyacá”. Él vio que me fue bien (hice 11° en la CRI y 17 en la general) y finalmente fui con ese equipo al clásico. 

¿Cómo le fue en ese Clásico?
Corriendo para Fuerzas Armadas, en el Clásico
RCN que salió de Cartagena.
Yo llegué mentalizado a meterme en las fugas y hacerme nombrar, porque iba a ser la oportunidad de encontrar un equipo más grande para 2013. El Chepe es muy combativo a la hora de correr, lo fue como ciclista y lo es como director. En la etapa del alto de Ventanas me dijo que tenía que arrancar desde Valdivia, que él se había ganado esa etapa arrancando desde ahí cuando fue ciclista. Le hice caso a la de Dios, (al fin y al cabo él fue el que me llevó a correr y yo no tenía nada que perder). Fue una locura atacar tan temprano, ese día perdí 40 minutos, pero El Chepe me miró con risa y me dijo “Fresco, mijo, unas se ganan otras se pierden. Usted está andando bien”

En la etapa que llegaba a Tunja entré en la fuga, quedé 5° en la etapa. A raíz de eso, y como ya me conocía con Carlos Ramillete Pérez, le dije que en Boyacá había sido difícil conseguir equipo, que me abriera campo en el Supergiros que él manejaba. Me presentó a Libardo Montoya ese mismo día y me dio la palabra de que el otro año (2013) me iba a colaborar. 

Este ha sido su mejor año, ¿cierto?
Sin duda. Comencé a prepararme muy animado, no quería decepcionar y para inicios de febrero estaba muy bien, participaba en las carreras que los pueblos de Boyacá organizan para sus fiestas. Pero ya hablando de las carreras de ruta, comencé en la Vuelta al Valle, que es una carrera con varias etapas planas y a la que íbamos con Victor Hugo Peña como líder. Quedé 10°en la general. Después de esa carrera fue el campeonato nacional.

¿Por qué lo corrió por la liga del Meta?
Porque en Boyacá no conseguí apoyo, entonces nuevamente Antonio Alarcón (que ya estaba en la liga del Meta hacía 2 o 3 años) y el entrenador Argemiro Flórez, que ya me conocía ben, me permitieron correr. También conocía a los otros ciclistas de allá: Cristian Gutierrez, Cristian Serrano y Omar Mendoza. 

¿Cómo se desarrolló esa prueba?
Antes de responderle quiero contarle una anécdota: La noche anterior salimos a cenar y decidimos tomarnos una foto. Yo llevaba una camisa con algo reflectivo en el pecho, el flash se reflejó ahí y la foto salió con un resplandor en el pecho, entonces le dije a mi novia Alejandra: “Mira lo que me Salió, eso es que mañana cogeré medalla”, pero yo lo decía recochando, en realidad no pensaba que me fuera a ir tan bien.

Ahora sí, sobre el circuito: Ese día llovió, hubo caídas, tuve un pinchazo, se puso peligroso… En la última vuelta iba una fuga con Felipe Laverde, en el grupo iban los favoritos Felix El Gato Cárdenas y Alex Cano, y yo estaba atento, sabía que iban a mover la carrera porque si no lo hacían, Laverde ganaba. 

En un repecho atacó Félix, yo logré salir tras él, y seguir derecho hasta alcanzar a Felipe. Conmigo venía Andrés Miguel Dáz que nos pasó, pero logramos irnos los dos haciendo relevos. Faltaban unos 3km. En la recta final miré el grupo y ya venía encima de nosotros. Antes de entrar en las vallas bajé el cambio, pero no me entró bien y perdí un poco el impulso. Félix lanzó el embalaje del grupo y Walter Pedraza venía detrás de él y me pasó en la línea de llegada.

¿Cómo fue el tema de la convocatoria a Panamericanos? 
A raíz de ese resultado, me llamaron y dijeron que había la posibilidad de que fuera al panamericano, pero no me hice mucha ilusión porque yo era un ciclista que no había ganado nada aún, era desconocido, pensé que si iban ya tenían la gente. Después Jenaro Leguízamo me llamó y me preguntó si quería ir, yo le respondí que sí, pedí permiso al equipo que me lo dio sin problemas. Fuimos convocados cuatro: Felipe, Walter, Félix y yo. Me sorprendió que no llevaran corredores para la contrarreloj, porque esa también hubiera sido una medalla fija para Colombia

¿Cuál era inicialmente la táctica de carrera?
Al ver la convocatoria pensé “Yo soy el del sacrificio” (risas). Teníamos que amarrar la carrera, no se nos podía escapar la medalla, la idea era ganarla con El Gato. Eso mismo creyeron todos los rivales, todos cuidaban mucho a los otros tres, siempre salían a perseguir si arrancaban.

En un repecho,  El Gato pegó un apretón y quedamos unos 30, el resto se quedó descolgado. Había corredores que saltaban pero en el lote no se movían porque todos pensaban “que persigan los colombianos” y eso era mucho trabajo para mí. Lo que había que hacer era que uno de nosotros se fuera en fuga. 

Entonces salió el ecuatoriano Navarrete y Felipe me hizo la seña de que lo alcanzara. Empezamos a relevar y le llegamos al Mexicano Sarabia que había salido antes, y armamos una fuga los tres. Le dije a Jenaro que me sentía bien, con eso los otros tres colombianos ya no necesitaban tirar del lote. Él me dijo como táctica “A rueda porque El Gato viene atrás”, entonces no les di relevo a los compañeros de fuga haciéndoles creer que el favorito seguía atrás. Se molestaron por eso (risas). 

La táctica de ellos dos entonces era atacarme para que yo persiguiera, y cuando alcanzara al que había atacado, me atacaría el otro y así me podían reventar. En un momento atacó el mexicano y no lo perseguí sino que esperé el momento preciso para atacar sin que el ecuatoriano me persiguiera, lo logré descolgar, llegué al mexicano y también en otro repecho le arranqué y cuando me vi solo seguí con mi paso hasta meta y quedé campeón.

¿Cómo fue ese podio?
En el podio se me fue la cabeza… me acordé de mis papás, de todo el esfuerzo que han hecho, del esfuerzo mío, de las personas que estuvieron en contra de mi convocatoria y de las que intercedieron para que me llevaran, (como Argemiro), del apoyo que me brindó Jenaro, que no solo es muy bueno profesionalmente sino que es un gran ser humano. Me acordé de mi novia Alejandra, que ha sido un apoyo incondicional y un soporte para los momentos difíciles… Estuve muy contento, muy feliz, mi hermana me contó que mis padres se volvieron locos de alegría. Es por ellos por quienes yo hago todo el sacrificio. 

¿Qué sucedió a su regreso?
Con Jenaro Leguízamo, en el Campeonato
Panamericano Zacatecas 2013.
Pude correr la vuelta a Colombia pero desafortunadamente me retiré cuando llegamos a Bogotá porque me sentía muy enfermo. Pensé que de pronto era sobreentrenamiento, pero finalmente resultó que tenía hepatitis A. No sé si venía enfermo de México o me enfermé en Ecuador. Estuve un mes en casa recuperándome. 

Después fui a la Clásica de Boyacá, pero cuando íbamos por Sutamarchán se me atravesó un perro, me caí y me fisuré dos dedos. Yo me dije “¿Qué pasa? Salgo de una y entro en otra”. Pensé hasta en dejar así este año, pero al final decidí seguir entrenando con un simulador, diariamente 3-4 horas. Fueron 25 días de simulador, tras de los cuales pude competir en la Vuelta a Boyacá. Ahí finalmente logré buenos resultados para el equipo que me dejaron tranquilo porque lo que yo había ganado había sido por fuera. Entonces me convocaron para correr el Clásico RCN.

¿Cómo le fue en el clásico?
Muy bien, estuve en la Fuga de Zipaquirá, fui top10 durante varios días y quedé segundo en la etapa de Buenaventura.

Eso fue lo que le abrió las puertas al Team Colombia
Sí, recién llegué del panamericano me había llamado Oliverio Rincón preguntándome qué tenía para el otro año, me pidieron unos exámenes médicos y unos datos. Pero pasó un buen tiempo sin que se volvieran a comunicar hasta que cerramos la vinculación. Esta semana tuvimos una reunión Claudio Corti, Oliverio Rincón y los cuatro nuevos refuerzos (Rodolfo Torres, Luis Largo Eduar Díaz y yo), pero fue una reunión más para conocernos y charlar informalmente. Aún no conozco al resto del equipo.

¿Le hablaron de cómo será su calendario 2014 y su rol en el equipo?
Todavía no. Yo tengo claro que voy a aprender y a aportar todo lo que pueda colaborar. El equipo corre muchas carreras de un día, que me gustan y en las que me va bien. Tengo claro que trabajaré para los líderes del equipo, espero aprender mucho de ellos, y ojalá que en algunas ocasiones sea yo el que se sienta bien y esté en un buen momento para buscar una victoria. Me siento muy optimista y contento porque este es el sueño de cualquier ciclista y trabajaré muy duro para hacer un buen papel

¿Cuándo viajará a Europa?
Parte del Equipo irá al Tour de San Luis, pero nosotros los nuevos debemos viajar en Enero a Italia para solucionar el tema de la residencia en Italia y hacer todo ese papeleo. Muchos dirán que irse a chupar frío (risas), pero en realidad es por esos trámites.

Pues mucha suerte, Jonathan. Esperamos que tenga muy buenos resultados y estaremos pendientes de su temporada y de las noticias alrededor de usted
Muchas gracias a ustedes. El año que viene daré mi 100% para darle muchas alegrías a mis padres y a toda la afición.