El paso en falso de Fabio Duarte

(Por Gianni in Testa)

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Le puede pasar a cualquiera: llegas a una empresa en la que te encuentras a gusto, las compañeras son lindas, el jefe es simpático, los compañeros son amables, te traen el tinto en la cantidad y temperatura correcta en tu pocillo preferido (ese que te regaló tu mujer y que tiene un corazón), el sueldo no te preocupa, pero pasa el tiempo y no creces ni mejoras profesionalmente, no aprendes nada, tus resultados son "apenas aceptables" y a veces ni eso.  Comienzas a acomodarte en la zona de confort, recibiendo tu sueldito y prefiriendo seguir ahí en vez de incomodarte y salir a buscar un mejor trabajo con todo lo que ello conlleva.

Pues eso en lo que le pasa a nuestro Fabio Duarte, joven talento veinteañero, siempre se destacó ampliamente por encima de toda la gente de su generación, incluso muy claramente por encima de Sergio Luis Henao (quien le ganó una vuelta a la Juventud solamente gracias a una caída de Duarte bajando La Línea).  Duarte se ganó un mundial increíble:  Varese 2008,  una de las más grandes gestas hechas por un Colombiano en la historia, entre el top 3 para mí.  Dio el paso al gran ciclismo en el Geox y no lo hizo mal: gente como Menchov lo querían en el WT con ellos, ¿y qué pasó? decidió devolverse a la empresita con las compañeras lindas, el jefe bonachón y el "ambiente familiar", y nos vendió la idea diciendo que se "sacrificaba" por el bien del proyecto del team Colombia y del país, y todos lo agradecimos, sonaba bien.

Hoy Henao ha salido muy adelante: viste los colores del mejor equipo del mundo, sale a entrenar con la mejor generación de contrarrelojeros, pisteros y escaladores de los ultimos años, está en un equipo apasionado por los detalles y la técnica, exigente, profesional.  Su ambición Antioqueña lo ha llevado a superar sus limitaciones y a pensar con grandeza, mientras tanto Fabio languidece en su equipo, con su recién adquirida mentalidad de mediocre regulero.

Lo malo es que los resultados no lo apoyan (ni los de todo el equipo , para ser sinceros), han sido modestísimos este año, se ha llenado de excusas y disculpas para explicar sus fracasos. Se ha vuelto un corredor que se oculta tras del bajo rendimiento del equipo para mostrar su trabajo, se autoexcluye de implicarse en las carreras bien rapidito, en la primera o segunda etapa , está a 3 minutos y ya su trabajo (siempre por algún percance, estilo Cadel Evans subiendo el Telegraph hace 2 años cuando se le "apretaron los conos de la rodilla" y se bajó de la bici) se vuelve el de gregario de lujo para Atapuma e incluso Pantano.  Los que siempre lo hemos respaldado decíamos que era importante esperarlo por respeto a su palmarés y condiciones.

Hoy nos sorprendemos que en vez de tomar la valiente y necesaria decisión de abandonar la empresita familiar que tanto lo quiere y buscarse un nuevo empleo en donde le implique sacrificarse y crecer como profesional, ha decidido seguir insólitamente igual...rodeado de un ambiente perdedor que todo le justifica y en el que se acostumbró a a pensar con una bajísmo perfil de autoexigencia y dignidad profesional.

Fabio prefirió quedarse en la zona de confort y no en convertirse en el referente del ciclismo nacional como apuntaba a ser.  Por lo menos que no venga a vendernos humo y a decirnos que lo hace por apoyar el proyecto del Team Colombia, que el ama al país (Como si los que están en equipos extranjeros no lo hicieran), que confía y respalda el proyecto y bla, bla, bla.  Es una lamentable decisión mediocre, que le va a pesar en un equipo seriamente minado en su moral y no respaldado ni por la billetera del gobierno ni por los resultados.